Maldita calavera

No mires demasiado tiempo… o te devuelve la mirada.

Las calaveras se ríen de todo, de la muerte, de las sombras y de ti también, si te pones intensito. Es el emblema de lo que no se puede domar. Aquí se cuece lo oscuro, lo gamberro, lo que solo algunos se atreven a mirar de frente. No hay filtros. No hay perdón. Solo verdades afiladas con sonrisa torcida.
¿Vienes o te acojonas?

Vírgenes & Diablitos

Donde lo sagrado y lo salvaje se dan besos con lengua.

Ni vírgenes tan puras, ni diablos tan malos. Aquí se mezclan los polos opuestos, se cruzan las miradas en misa y se cumplen todos los pecados capitales… pero con clase. Este rincón es para los que rezan por la mañana lo que pecan por la noche. Para quienes saben que lo celestial no excluye lo carnal.
¿Te atreves a entrar o necesitas confesarte antes?

La Catrina

Una sonrisa pintada, mil verdades calladas.

Elegante, mortal y con más flow que una botella de mezcal en una fiesta clandestina. La Catrina no es solo una figura: es un estilo de vida… o de muerte. El arte de tomarse la muerte a sorbos pequeños y la vida a tragos largos. Aquí el folclore se retuerce, la tradición se desmelena y el respeto se gana bailando en la frontera.
¿Tienes ritmo o te tropiezas con los vivos?

Dr. Matanza

Especialista en abrir cabezas y dejar ideas sueltas.

No es doctor, ni falta que le hace. Su bisturí es la palabra, y su consulta está abierta 24/7. Aquí se disecciona la realidad sin anestesia: ideas incómodas, reflexiones cabronas y verdades que queman más que el tequila barato.
Bienvenido al quirófano del pensamiento bastardo.

Pasa, que no duele (mucho).